QUINTETO PINTIN

Cinco connotados músicos del entorno, de distintas edades como corrientes y estilos – intercambiando ideas y sugerencias – resolvieron desarrollar juntos un grupo de tipo camerístico, que aprovechara el espacio creativo sonoro así generado y, amalgamar el concepto rítmico-musical de Pintín Castellanos con tendencias actuales para una suerte de creación – valga el término – “neo-tradicional”, acompañando esta iniciativa con la incorporación de diferentes elementos e, introduciendo instrumentos vistos como, no convencionales, con composiciones propias de sus integrantes y arreglos modernos para un versátil y ecléctico repertorio. Así, nace el Quinteto Pintín.

Este, “segmento", en el contexto musical, no tiene en el país – y en la región son muy pocos – los exponentes que, a partir de una formación con músicos de probada calidad, solvencia técnica y experiencia, esto les permita moverse con soltura en el género y con la libertad de expresarse musicalmente. El Quinteto Pintín viene a ocupar ese lugar.

Se ha caído, muchas veces, en la monotonía, la que puede llegar a desalentar al público, manteniéndolo en la rutina al conservar los mismos elementos y, es oportuno tomar nuevos rumbos. La permanencia del tango, la milonga, el candombe y lo popular se propicia por su capacidad de renovarse. A eso, en los hechos, apunta la propuesta del Quinteto Pintín.
El Quinteto Pintín, personifica un espacio creativo para el tango, la milonga, el candombe y, el folklore rioplatense con énfasis concreto en lo nacional. Con un tratamiento moderno y contemporáneo, dispone de arreglos ambiciosos y preparados especialmente, en un repertorio que contempla la excelencia tanto musical como, la calidad de interpretación y puesta en escena.
Son interpretaciones las que, en su conjunto, buscan resumir el concepto, el pensamiento del Quinteto Pintín y sus integrantes el que, además de testimoniar y homenajear (al inspirador), es un vehículo de promoción, de divulgación del género popular rioplatense, desde una óptica moderna y fresca.

El Quinteto Pintín está integrado por el maestro Panchito Nolé, en el piano, la dirección musical y arreglos, Gastón Buenseñor en batería y percusión, Cono Castro en contrabajo, Maximiliano Nathan en el vibráfono y, Miguel Trillo en bandoneón.

JORGE ROCHA
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“QUINTETO PINTÍN”
El CD y sus 12 temas:

1) A lo Pintín. Si bien es cierto que Pintín Castellanos no era un gran ejecutante del piano, era sin embargo, un compositor inspirado en lo que a lo popular atañe: candombes y milongas.
Con formas acústicas inspiradas en su concepto rítmico, se recrea aquí el estilo de Pintín Castellanos. El vibráfono unido al piano y al bandoneón, ensamblados a unísono (con el piano) y el pulso firme de la percusión le dan a esta pieza, una característica moderna como singular.
2) Candombe, Milonga y Tango. Se le imprime, un tratamiento especialmente característico – sin que pierda la esencia rioplatense – con la fuerza del candombe, la plasticidad de la milonga y, el sentimiento y altivez del tango.
3) La Puñalada. Obra cumbre de Pintín Castellanos. Licencia que se toma el arreglador creando el clima que precede a la clásica escala cromática (ascendente y descendente) del original.
4) Décadas. El arreglo, recrea una base, “Puglesiana”, con el característico acento arrabalero (acentos en el primer y cuarto compás) destacando la figura de la sección rítmica, el “gemido” del bandoneón y la picardía del vibráfono, en una clara evocación de los emblemáticos sonidos de los años 40’ a la fecha. Los últimos 16 compases, sugieren las voces cambiantes de la ciudad.
5) Distancias. En esta pieza, se aprecia nuevamente el arreglo contrapuntístico con una introducción “Chopiniana” – del piano – que luego reitera el bandoneón, con un final que refleja la nostalgia que producen las distancias.
6) Meta Fierro. Otra clásica milonga de Pintín, dedicada al malogrado piloto de autos, Héctor Supicisede. Un arreglo de claras reminiscencias rokeras para, de la parte central de la composición, realizar una lograda fusión con el candombe con, la voz original de Pintín Castellanos como antesala al tema, cuyo final, nos remite a los tradicionales corsos de viejos carnavales.
7) Tangos en Fa. Una selección de cinco “joyitas” históricas del tango, reunidas en forma de suite – en piano solo – con reconocibles aires jazzísticos.
8) Sofía. Típico vals criollo – semejante a un Minué – pero, con un fraseo distinto en las formas del bandoneón, el vibráfono y el piano. De fondo se aprecia una sección de cuerdas graves (sintetizadas).
9) Jugando con Delfi. En la pieza, el autor refleja el sentimiento del abuelo y, la alegría de su nieta (Delfina) con una melodía alegre, juguetona y romántica – tal como la niña se manifiesta – logrando el sonido particular que tiene el tango argentino, que tiene en Osmar Maderna y Horacio Salgán, sus máximos exponentes.
10) Libertango. Al referirse a sonidos modernos y de fusión, es inevitable, el incluir la obra de Piazzolla, en consecuencia, en el arreglo de esta versión un “nocturno” del piano con un recitado del bandoneón, anteceden el desarrollo de la pieza para, alcanzar el clímax final a todo ritmo.
11) Milongandombe - Lamento de murga. El Segundo y tercer movimiento, extraídos de la “Suite Popular Montevideana”, cuya 1ª parte es una mezcla de milonga y candombe “conversada” entre el piano y el vibráfono, complementados por los demás instrumentos, con énfasis en la percusión. La 2ª parte (Lamento de murga) sobre una base rítmica y armónica en tono menor (marcha camión). Se escucha de fondo, como sugerencia, el típico coro de las murgas de antaño, de introducción a una línea melódica (bandoneón) triste y, a la vez, nostálgica.
12) Tres solitarias (Bonus Track). El autor, quiso reflejar su juventud, energía y creatividad, reuniendo en una forma fresca, distintos tópicos sobre la rítmica del candombe – con “toques” al estilo Chick Corea – y, con la complicidad del arreglista, logran un moderno clima latino de jazz y candombe